El chiste de crear

Toda persona creativa ha tenido temporadas en la que no le fluyen las ideas, no sé si te ha pasado que a la mitad de un proyecto te quedas atorado, no sabes como terminarlo o de tanto intentar resolver un problema ya no sabes por donde más buscarle.

Como te has dado cuento he escrito para esta revista ya por un largo rato, aveces pienso que ya no hay nada nuevo que contar.

Así que... ¿A dónde voy para contarte nuevas ideas?

En los libros, en internet, en las revistas están las mismas ideas de toda la vida, me aburro de no ver cosas nuevas. Entonces salgo y me pongo a platicar con personas que no conozco de nada, en la parada de autobús, en un café, en las tiendas, en el supermercado,  me cuentan sus problemas, los escucho. De vuelta a casa camino por alrededor de 40 minutos o más. 

De inmediato no le encuentro solución a nada de lo que me dijeron, incluso no me fluye nada útil que mejorar, pero si me surgen ideas de cosas que yo podría hacer o cosas que le podrían servir a alguien más. Así que de inmediato llego a casa y escribo cualquier cosa que me haya surgido. Aveces el ataque de creatividad dura varias páginas.

Si a ti te pasa lo mismo, no te desesperes, deja de hacer lo que estás haciéndo, mientras más tiempo pases en solucionarlo, menor  va ser la posibilidad de que puedas resolverlo o de que te llegue la famosa eureka. Para, date un tiempo, sal, no tienes que caminar por 40 min, pero si es importante hablar con extraños, los outsiders, posiblemente sean la mayor fuente de conocimiento que vas a encontrar en tu vida.

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